Raised By Wolves, un producción muy Ridley Scott
Raised By Wolves es una serie de ciencia ficción creada por Aaron Guzikowski para HBO Max. Por alguna razón eso no implica que se emita en HBO España, sino que solo la podemos ver en Movistar+. A Guzikowski lo conocemos por ser el guionista de la estupendísima película Prisioneros (2013) dirigida por Denis Villeneuve. En esta ocasión ha escrito la mayoría de episodios de la serie. Además, detrás de Raised By Wolves se encuentra Ridley Scott en la producción, y también en la dirección de los dos primeros capítulos.
Dos robots con forma humana, llamados Padre y Madre, llegan a un planeta desértico y, en principio, deshabitado para criar a unos bebés y así regenerar la raza humana tras algún tipo de cataclismo que la ha puesto al borde de la extinción. Con esa premisa se desarrolla una historia de ciencia ficción donde el conflicto principal gira en torno a la religión, ya que en la Tierra se dio una lucha entre el ateísmo y la fe.
En ese sentido, tenemos un enfoque clásico, donde la cobertura de la ciencia ficción sirve de excusa para plantear otro tipo de cuestiones más profundas y más humanas. En este caso por un lado sobre el fanatismo religioso, la irracional creencia en dioses y las consecuencias sociales que conlleva. Pero por otro la fuerte necesidad del ser humano en creer en algo que le dé respuestas fáciles y sencillas para explicar su propia existencia.
Este debate está en Raised By Wolves, pero no esperemos encontrar respuestas en la serie. Más bien al contrario. Conforme avanza la trama esta se vuelve más loca y cada vez se nos abren más preguntas sin respuesta. Esto es un camino peligroso para los creadores. Porque o empiezan a resolver satisfactoriamente las cuestiones que van abriendo o corren el peligro de convertirse en otra Perdidos o en otra Westworld.
La producción es muy Ridley Scott. La ambientación, así como las cuestiones que plantea la serie, recuerdan mucho a las secuelas e Alien del propio Scott, hablo de Prometheus (2012) y Alien: Covenant (2017), ambas películas lamentables. En esta ocasión el resultado es mucho más satisfactorio, quizá porque el hecho de que no tener relación directa con la saga Alien hace que todo resulte más fresco e intrigante.
No hay interpretaciones destacables en Raised By Wolves. Algo que no nos sorprende, ya que los dos protagonistas adultos son dos robots cuya interpretación consiste en poner cara de póquer la mayor parte del tiempo. A Amanda Collin, en el papel de Madre, ya la vimos hacer un buen trabajo en la muy recomendable The Exception (2019). De Abubakar Salim como Padre no tengo más referencias que lo que he visto aquí.
También contamos con la participación de Travis Fimmel como Marcus. La verdad es que no me acaba de gustar como actor. Quizá su actuación tan histriónica pegara bien en su papel en Vikingos, con el que se hizo famoso. Pero al verlo aquí solo me ha confirmado que su registro como actor es muy limitado.
Raised By Wolves resulta ser una serie de ciencia ficción muy interesante y entretenida, que se deja ver sin perder la atención. La buena producción ayuda a que esto sea así. Pero el guion se mueve todo el tiempo en la cuerda floja entre las reflexiones profundas que van a alguna parte y la simple tomadura de pelo. Con una sola temporada todavía no es suficiente para discernir si esta serie va a ser un éxito o un rotundo fracaso. Habrá que esperar.
- La buena producción