Cristal de M. Night Shyamalan, un digno final para El Protegido

El director y guionista M. Night Shyamalan vuelve con Cristal (Glass) protagonizada por James McAvoy, Bruce Willis, Samuel L. Jackson y Sarah Paulson. Shyamalan se hizo famoso con la película El Sexto Sentido (1999), pero también por ser un director tan personal como irregular y, en general, por la baja calidad de sus películas.

Con Cristal el director de origen indio se atreve a retomar una de sus pocas películas a las que podríamos calificar com muy buena: El Protegido (Unbreakable, 2000). Y es que, junto con Múltiple (Split, 2016), estas películas forman parte de una trilogía de la que Cristal es el colofón.

Múltiple era una película decente, pero no demasiado interesante más allá de la interpretación de McAvoy, que encarnaba a un personaje con varias personalidades. Solo al final, con la aparición de Bruce Willis se desvelaba la relación que podría tener con El Protegido.

Con Cristal se confirma que Shyamalan pretendía cerrar una trilogía juntando a los personajes de ambas cintas. Y, para ser sinceros, más o menos lo consigue de forma bastante digna, entendiendo el concepto «digno» en el contexto de lo que vienen a ser las líneas generales de su cine.

El comienzo de Cristal es lo mejor de la película. Bruce Willis persigue a James McAvoy y la promesa de un enfrentamiento entre ambos crea una tensión muy bien llevada. Es en la parte central de la película cuando esta se vuelve más irregular. Solo consigue remontar hacia el final, aunque nunca llega a estar a la altura de las expectativas creadas al principio.

La película de M. Night Shyamalan es irregular en su desarrollo y el manejo de los ritmos, y el guion en algunos momentos un tanto absurdo -marca de la casa del director-. Sin embargo, se deja ver si uno no se pone muy exigente y acepta la premisa que se plantea. En cuanto al manejo de los tiempos, el final se hace largo de más, lo cual lo vuelve un tanto anticlimático.

Dicho lo cual, lo cierto es que, en el contexto del universo que ha creado Shyamalan, Cristal supone un buen cierre para esta trilogía -de la que nos hemos enterado de su existencia ahora-. Ni en broma ni Cristal, ni Múltiple están a la altura de El Protegido -que es aún una película muy buena por sí sola-, pero resulta un colofón decente para la historia de sus personajes. Y es que lo mejor de esta serie es el enfoque tan particular y original del mundo de los superhéroes es supone.

En cuanto a las interpretaciones solo es destacable la de James McAvoy, que repite el papel que ya encarnó en Múltiple. El caso es que ahora pierde fuerza, por un lado porque ya no hay novedad, y por el otro porque sus diferentes personalidades resultan más interesantes y completas acompañadas de sus respectivos disfraces, cosa que en Cristal no ocurre. De hecho, la parte más cargante de la película es cuando el director se empeña en enseñarnos todas las personalidades de McAvoy y su capacidad para transformarse.

El resto hacen papeles más bien planos, empezando por Bruce Willis, que su único mérito es haber encarnado a su personaje hace casi dos décadas. Lo mismo se puede decir de Samuel L. Jackson, que tampoco destaca demasiado. Una pena, teniendo en cuenta que esta película está dedicada a él -las dos anteriores lo estaba a cada uno de los otros protagonistas respectivamente-. En cuanto a Sarah Paulson, qué decir, nunca me ha gustado como actriz y en este caso no es una excepción.

Para disfrutar Cristal completamente es necesario conocer las dos películas anteriores. Algo que no se avisa al espectador ocasional, el cual puede perderse fácilmente en la trama de una historia a la que le falta elementos para comprenderla.

En cualquier caso, aunque irregular, Cristal se ve con interés y si disfrutasteis de Múltiple y, en especial, de El Protegido, no os la perdáis.