Detrás de sus Ojos, una serie polémica por tramposa
Una serie de Netflix que está dando mucho que hablar estos días es Detrás de sus Ojos. Basada en la novela homónima escrita en 2017 por Sarah Pinborough, la miniserie está creada, escrita y dirigida por Steve Lightfoot. Anteriormente Lightfoot hizo un muy buen trabajo con la serie The Punisher, lo cual ya es un buen precedente.
Detrás de sus Ojos nos relata un triángulo morboso entre nuestra protagonista Louise (Simona Brown), la cual mantiene una relación con su jefe David (Tom Bateman) a la vez que se hace amiga de la mujer de este Adele (Eve Hewson). A partir de aquí se va construyendo un thriller psicológico que se intuye que no puede acabar bien.
Esta primera parte de la miniserie está bien narrada, con un buen ritmo que mantiene el interés del espectador hacia dónde van a dirigirse los acontecimientos. Si bien Bateman no hace un trabajo especialmente remarcable, las dos mujeres sí que destacan en sus interpretaciones. En especial Eve Hewson en su papel de la inestable Adele. Es cierto que su papel es el más agradecido, pero también se nota que es una actriz con una mayor trayectoria.
La polémica con Detrás de sus Ojos llega con las críticas que está teniendo sobre su desenlace. No voy a hacer spoilers, pero cualquier que haya ojeado un poco Internet ya sabrá que hacia el final empiezan a ocurrir cosas muy locas que son las que han causado tanto disgusto a buena parte del público.
El problema de Detrás de sus Ojos no es el desenlace, que es interesante e incluso tiene un punto retorcido muy de mi gusto. Sino que la serie en sí resulta ser muy tramposa. Te hace un planteamiento en los primeros capítulos sobre el tipo de serie que es que cambia hacia el final, revelándose como un relato de otro género.
Es normal que eso desconcierte e incluso irrite a buena parte el público. Una norma básica a la hora de contar historias es pactar al principio con el público una serie de reglas, que luego deben respetarse hasta el final para que el relato se mantenga coherente y verosímil. Aceptamos que existe un super hombre que vuela y es inmune a las balas como Superman, pero no puede ser que sin razón alguna más adelante este pueda ser herido por una bala.
Esas normas básicas son las que se vulneran en Detrás de sus Ojos. La intención de provocar la sorpresa en el espectador por medio de giros inesperados, en esta ocasión solo crea estupor e incredulidad, sacando al público el relato. La serie está mal narrada, porque ciertos elementos deberían haberse planteado desde el principio para no hacer trampas.
Más allá de eso, Detrás de sus Ojos resulta ser una serie entretenida y en la que no decae el interés que una vez que la empiezas no la dejas hasta ver cómo acaba el relato. Eso tiene su mérito. Es una miniserie recomendable si estás advertido de que te puedes esperar cualquier cosa.
- La interpretación de Eve Hewson