Black Mirror: Bandersnatch, el fenómeno de la temporada

El fenómeno de la temporada es sin duda la última entrega de Black Mirror: Bandersnatch. Se trata de una experiencia interactiva producida por Netflix y que solo se puede disfrutar en esta plataforma. ¿De verdad merece la pena? Vamos, a verlo.

Vaya por delante que a mí personalmente toda la serie Black Mirror me parece una chorrada tremendamente sobrevalorada. Para muestra ya hablé episodio por episodio de la cuarta temporada aquí.

Sin embargo en el caso de Black Mirror: Bandersnatch las diferencias con otros capítulos de la serie son lo suficientemente sustanciales como para afirmar de que estamos jugando en otra liga.

Para empezar, por su duración se trata más de una película que de un episodio, y eso que los de Black Mirror suelen ser especialmente largos, muchos de ellos directamente son mediometrajes. Aunque en este caso cuando hablamos de duración hay que hacerlo de forma relativa.

Y es que el punto fuerte de Black Mirror: Bandersnatch es que se trata de una película interactiva, en la que el espectador va tomando decisiones que afectan al desarrollo de la trama. Algo así como los libros de Elige tu Propia Aventura de los años 80.

Esta nueva entrega de Black Mirror va indivisiblemente asociada a la plataforma Netflix, ya que necesita de ella para poder disfrutar de la experiencia. Conforme avanza la trama la aplicación para la reproducción y te da la oportunidad de elegir entre dos opciones que condicionarán el desarrollo posterior de la historia. El Video-On-Demand da así un salto adelante a la hora de explotar las posibilidades de los nuevo medios tecnológicos, algo por otra parte perfectamente lógico.

Por fortuna Black Mirror: Bandersnatch no se queda en la mera superficie de la novedad del episodio interactivo, y nos ofrece un guion original que aprovecha de forma muy divertida y autoreferente el hecho de que el espectador esté participando en el mismo. La trama es, cómo no, un homenaje más a los ahora idolatrados años 80, con muchos guiños a cosas de aquellos años, en especial a los videojuegos, claro.

Es muy positivo el uso del sentido del humor, con escenas muy locas y muy divertidas, que hacen que ver, o participar en, Black Mirror: Bandersnatch sea algo muy entretenido.

Y es que el experimento les ha salido redondo y la experiencia resulta de lo más gratificante. De hecho la película de facto se alarga más de lo que indica su duración, ya que es inevitable volver atrás y ver qué habría pasado si eliges otras opciones y qué consecuencias tienen. Algo que os animo a hacer cuando la veáis, porque existen muchas posibilidades, algunas , com he dicho, muy divertidas.

En cuanto a la música, también la eliges tú. Yo opté, como no podría ser de otra manera, por el estupendo álbum Phaedra de Tangerine Dream. Un detalle muy agradecido.

El experimento del episodio interactivo ha sido todo un éxito, no cabe duda, y abre un futuro de lo más interesante y lleno de posibilidades para las plataformas de VoD. Las películas interactivas han llegado para quedarse. Por lo menos por un tiempo. Así que preparémonos para el aluvión de propuestas que sigan la estela de Black Mirror: Bandersnatch.

Black Mirror: Bandersnatch
6.8 Puntuación total
Pros
- La interactividad
- Las autorreferencias
- El sentido del humor
Contras
- Más allá de la novedad
no se trata de una gran película
Dirección
Guion
Arte
Actuaciones

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