El pasado 1 de junio HBO estrenó Deadwood: La Película. Se trata de un film producido con el fin de cerrar las tramas que quedaron en el aire cuando se canceló la serie del mismo nombre allá por 2006. Este estreno me da la oportunidad no solo de analizar la película, sino de repasar una de las mejores series que ha dado la televisión del presente siglo.
Deadwood: La Serie
Deadwood es el nombre del pueblo del oeste americano del cuál se nos relata la historia. El pueblo existió de verdad -de hecho aún existe- y muchos de los personajes de la serie están basados en personajes reales de formaron parte de su historia. Eso sí, en general están muy alterados los hechos de su vida con fines dramáticos.
Deadwood nos describe con maestría el paso de un pueblo minero sin ley a finales del siglo XIX, a uno que se va civilizando poco a poco según se integra en los Estados Unidos. Podemos ver cómo el tomarse la justicia por su mano va dando paso, según llegan al pueblo más gente y las nuevas tecnologías, a una forma más civilizada de hacer las cosas.
Este es el contexto en el que se desarrollan unos personajes carismáticos y complejos que también van evolucionando al igual que el pueblo que da nombre a la serie. Lo mejor de Deadwood es la forma tan realista y adulta de relatarnos la historia. Puede que alguien pudiera decir que el ritmo es lento, pero en realidad es justo el que tiene que ser para resultar verosímil y para que el público se enganche con las tramas y personajes.
En Deadwood no hay aspavientos ni golpes de efecto artificiosos. Su creador David Milch sabe mantener la tensión de los acontecimientos sin caer en el melodrama fácil. Lo cual también puede frustrar a quien siga la serie esperando los fuegos de artificios habituales en los productos para el gran público.
Puede que esta fuera la razón de la cancelación de la serie en 2006 tras tres estupendas temporadas. Sea como sea, aunque inconclusa, Deadwood es una serie que se puede ver sin miedo a quedarse colgado, puesto que el final de la tercera temporada es en cierta medida bastante conclusivo.
Deadwood: La Película
Desde luego quedaron muchos flecos sueltos, ya que la intención era que la serie tuviera más temporadas. Esa es la razón por la que por fin se le ha dado un remate a la serie con una película.
Dirigida por Daniel Minahan -también director de la serie- y con guion del propio Milch, Deadwood: La Película recupera a la mayoría de personajes de la serie original. Eso sí, lo hace doce años después, para que el paso del tiempo en los actores resulte coherente.
Lo cierto es que la película es apenas un episodio largo de la serie. Y ni siquiera de los mejores. Se trata de un homenaje nostálgico a la serie y sus personajes dirigido solo para fans. Tiene que quedar claro que la película no puede verse sin antes haber seguido la serie.
Eso sí, es muy respetuosa con el tono general al que estamos acostumbrados en Deadwood y una vez vista no cabe otra conclusión que la de reconocer que la película es Deadwood 100%.
No puedo terminar sin mencionar el enorme elenco de actores y actrices. Las interpretaciones de Ian McShane como Al Swearengen, Paula Malcomson como Trixie o Robin Weigert como Calamity Jane, por poner solo algunos ejemplos, son maravillosas. Sin embargo Timothy Olyphant como el sheriff Seth Bullock siempre me ha parecido el más flojo de todos.
Deadwood: La Película es un digno y necesario remate a una de las mejores series de la televisión del siglo XXI. Era necesaria. Los fans de la serie la esperábamos con ansia y no nos ha decepcionado.
Quienes aún no habéis visto la serie, ¿a qué esperáis?
- El ritmo
- Los personajes
