El nuevo disco de John Grant: solo para iniciados

John Grant acaba de publicar su tercer álbum en solitario titulado: Grey Tickles, Black Pressure, y bien merece una review.

La carrera de John Grant es larga y viene desde mediados de los años 90 con el grupo The Czars, que tubo un notable éxito. Tras la separación Grant comenzó su carrera en solitario con Queen of Denmark, un excelente disco de folk-rock basado en el piano.

Pero para mí fue en su segundo álbum Pale Green Ghosts cuando empezó a repuntar, un disco que representó un giro importante con respecto al anterior. En ese momento a Grant le habían diagnosticado VIH positivo y, según afirmó él mismo, eso le hizo replantearse su carrera.

Además de relatar su experiencia y su intimidad con el irónico sentido del humor que le caracteriza, John Grant se decantó en este segundo proyecto por aquello que siempre quiso hacer: música electrónica. El resultado fue un disco fundamental, en mi opinión.

Grey Tickles, Black Pressure, el tercer trabajo que ahora nos presenta, es continuista. De hecho parece una mezcla de los dos álbumes precedentes. Aunque tiene varios temas basados en la electrónica bastante contundente, lo cierto es que vuelve muy a menudo en este disco al lado folk de la vida. A mí me deja una sensación extraña, como de que no termino de ubicarme en esta colección de canciones.

Disappointing es el primer single y, de lejos, el tema más accesible del disco. Ilustro el post con el videoclip de este tema para que podáis escucharlo y porque me parece muy divertido. Es una muestra visual muy clara del tipo de sentido del humor de John Grant.

Sin embargo el resto del álbum requiere muchas más escuchas para meterse de lleno en él. Todo lo contrario de Pale Green Ghosts, que me encantó desde el principio. Con esto no quiero decir que sea un mal disco. Al contrario, sigue la esencia de los anteriores y eso es calidad asegurada.

Pero es música de la llamada independiente, lejos de los circuitos más comerciales y que requiere dedicarle tiempo y escuchas para poder apreciarla del todo. Algo a lo que en estos tiempos de fast-food y «fast-music» quizá ya no estamos acostumbrados.

Yo recomiendo empezar por Pale Green Ghosts y, si te gusta, seguir por este Grey Tickles, Black Pressure. Y también, si puedes, ir a verlo en directo, como yo tuve la oportunidad en el Festival de Jazz de Cartagena hace dos años.