1. El Partido Popular es el más votado
Esta obviedad es terrorífica. El partido de la corrupción, que es más una mafia de crimen organizado que un partido político; el partido de los recortes y el paro; el partido que ha gobernado a base de decretos ley y que da explicaciones a través de un plasma, es el más votado por las y los españoles. Tenemos lo que nos merecemos. En este país hay un problema tan profundo cuando preferimos votar delincuentes antes que otras opciones que se hace muy difícil ver el futuro con esperanza.
2. El PSOE se hunde y sin embargo Pedro Sánchez se salva
Sí, es sin duda irónico, pero a la misma vez que el PSOE saca los peores resultados de su historia, justo cuando dentro del propio partido estaban esperando ver rodar la cabeza de Pedro Sánchez, resulta que las posibilidades matemáticas de gobernar le han salvado el pescuezo. Un PSOE en las peores circunstancias puede tener la presidencia del gobierno. Bienvenidos a las contradicciones de la realpolitik.
3. Podemos consigue un resultado histórico
A pesar de toda la campaña del sistema contra ellos, y a pesar de sus propios errores -o no-, Podemos ha conseguido un resultado sin precedentes en el actual régimen. Han logrado una entrada en el Parlamento espectacular, y aunque no han alcanzado por poco el famoso sorpasso del que hablaba en su día Julio Anguita, sí que han puesto de verdad en jaque al bipartidismo como nadie antes. La remontada que anunciaban se ha producido y los sitúa muy bien para ser pieza clave en el futuro de este país.
4. Ciudadanos son los grandes perdedores
Ciudadanos es una operación del sistema para debilitar a Podemos y sus expectativas. En ese sentido ha cumplido muy bien su misión, porque de no haber entrado Ciudadanos en el Parlamento con esta contundencia seguramente Podemos ahora sería segunda fuerza por encima del PSOE, en votos y puede que hasta en escaños. Pero como en política, y más últimamente, lo que importa son las tendencias, lo cierto es que los resultados de Ciudadanos no se pueden leer más que como un fracaso. Los medios del régimen inflaron tanto sus expectativas que ahora que se han quedado tan lejos de ellas son los grandes perdedores de la jornada.
5. Izquierda Unida es el 5º partido en votos y el 8º en escaños
De poco le ha servido a UP-IU tener al mejor candidato -y el mejor valorado- y hacer la mejor campaña de lejos en las redes sociales rompiendo el aislamiento al que los medios de sistema los habían relegado. IU solo obtiene 2 diputados por Madrid gracias a una ley electoral antidemocrática. Aunque a estos hay que sumarles los diputados de IU que han salido por Cataluña y por Galicia y que los medios meten burdamente en el saco de Podemos. En cualquier caso un resultado injusto pero que se enmarca en lo esperable. IU no tenía nada que hacer con el tsunami de Podemos compitiendo en el mismo espacio político.
6. Gana Merkel con la mayoría absoluta del bipartidismo
Estas elecciones han creado un panorama totalmente nuevo en la composición política nacional, no cabe duda. Pero por llamativo que sea, lo cierto que es pocas cosas han cambiado. El bipartidismo del PPSOE suma 213 escaños, muy por encima de la mayoría absoluta. Es decir, que las elecciones las ha ganado Angela Merkel. Sin duda podrían cambiar cosas como la ley educativa o la ley mordaza. Pero en las cosas troncales, como la reforma del artículo 135 de la Constitución, los recortes, el déficit, las reformas laborales, la reforma de la ley electoral… no habrá cambio alguno. PP y PSOE estarán de acuerdo en eso y les dan de sobra los números para no necesitar a nadie más.
7. Las confluencias por el cambio son la esperanza
Si el resultado de Podemos ha sido bueno en general, mucho más lo ha sido donde han ido en confluencia con otras fuerzas del cambio, como en Valencia, Galicia y sobre todo en Cataluña. De haberse dado este proceso de confluencia en todo el estado se podrían haber contrarrestado mucho los perversos efectos de la ley electoral y, quizá, ahora estaríamos en una situación muy distinta y mucho más esperanzadora. No estoy repartiendo culpas -eso es más complejo-, pero sí que digo cuál creo que es el camino.
8. Los vascos y los catalanes quieren hacer política en España
En Comú Podem y Podemos son las fuerzas más votadas en Cataluña y en el País Vasco respectivamente. Las municipales catalanas estaban desvirtuadas por la intención de Artur Mas de convertirlas en un plebiscito -con mucho éxito-; y en Euskadi también triunfó el nacionalismo con el PVN en cabeza y EH Bildu en segunda posición. Pero estos partidos, aunque se presentan a las elecciones generales, suelen desvincularse de la política española cuando llegan al Congreso de los Diputados. El que en estas dos comunidades, a pesar de los recientes resultados municipales, en las generales el pueblo haya optado mayoritariamente por una opción de cambio de carácter estatal es para tomar nota.
9. Mariano Rajoy no será presidente
De todo esto resulta que los números no le dan a Rajoy. No es tanto quién puede apoyar al PP como quiénes jamás les darán el apoyo. El problema serio de todo esto es que la alternativa es Pedro Sánchez. Es decir, también bipartidismo, reforma laboral, recortes, corrupción… Ciudadanos ante este panorama se ha lavado las manos para quedar limpios a la espera de tiempos mejores. Es Podemos quien se encuentra ahora en un brete: permitir un gobierno de Rajoy o uno de Pedro Sánchez. Lo de Rajoy es impensable, y con Sánchez quizá se puedan introducir modestos cambios, aunque ninguno de fondo. Al fin y al cabo seguiría siendo pactar con la casta. En cualquier caso la realpolitik mancha y pasará factura a Podemos.
10. Habrá elecciones anticipadas
La otra otra posibilidad es que nadie se ponga de acuerdo en dos meses y vayamos a otras elecciones anticipadas donde los partidos del régimen traten de recomponerse y Podemos -ya sin una competencia seria por parte de Ciudadanos- intente el asalto final a los cielos. Incluso si se formase gobierno en menos de dos meses dudo que dure mucho una estabilidad política tan cogida por los pelos. Esta será la legislatura más corta del régimen del 78 y el adelanto electoral se dará más pronto que tarde.
Cuando llegue ese momento espero que tanto las fuerzas del cambio como los votantes estemos a la altura y hagamos las cosas con cabeza.