Esos son otros López

Anomalisa: La película del año

Anomalisa es el estreno cinematográfico de la semana, del mes y, seguramente, del año. Sin embargo en España solo se proyecta, hasta donde yo sé, en un total de ocho salas, la mayoría de ellas en las grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla. Luego hablarán de que si la gente no va al cine, que si la piratería, que si tal o que si cual. Pero es que la oferta es lamentable y quien quiera ver buen cine tiene pocas alternativas.

Volviendo a la película en sí, digo que Anomalisa es la película del año por dos razones principales. La primera porque está escrita por Charlie Kaufman, el guionista más personal y más genial que hay actualmente en Hollywood. Aunque no siempre ha acertado de pleno, él es el responsable de las incuestionables obras maestras ¡Olvídate de mí! (Eternal Sunshine of the spotless mind, 2004) y El Ladrón de Orquídeas (Adaptation, 2002).

La segunda razón es porque se trata de una película de animación, concretamente realizada en stop-motion, técnica que consiste en animar objetos fotograma a fotograma. Y en este aspecto es ciertamente original. No por el hecho en sí de estar realizada en stop-motion -hay cantidad de películas con esa técnica-, sino porque narrar una historia dramática con muñecos y hacerlo tan bien hasta el punto de que el espectador olvide que está viendo una animación es realmente extraordinario.

Anomalisa nos habla de la soledad, de la dificultad de conectar con las personas que nos rodean, de la frustrante necesidad de amar y no conseguirlo. Y lo hace de la forma más original posible, de hecho al principio puede resultar desconcertante, hasta que te das cuenta de qué es lo que le ocurre realmente al protagonista.

Es una película de animación, sí, pero para adultos. Ya que el mensaje es triste y desolador. Por no hablar de las escenas explícitas que contiene -y sí, seguimos hablando de muñecos-. Otro factor importante, marca de la casa de Kaufman, es el sentido del humor: oscuro y deprimente, pero humor al fin y al cabo. Todo ello hace que Anomalisa sea, efectivamente, una anomalía en el panorama cinematográfico actual. Una maravillosa curiosidad que no hay que perderse.

El proyecto de Anomalisa surge de una obra de teatro escrita por el propio Kaufman. Para trasladarla a la gran pantalla se optó por la animación para que no se perdiera la esencia de la obra, ya que esta sería difícil de reflejar en una película convencional. Y es cierto que el hecho de que sea una película animada le permite a Kaufman salirse por la tangente de la realidad y construir uno de esos universos suyos tan particulares.

Charlie Kaufman codirige Anomalisa junto con Duke Johnson, especializado en animación stop-motion. No es difícil de deducir que Johnson es el responsable de apartado técnico y Kaufman del dramático. Para realizar el proyecto, en un momento en el que en Hollywood prácticamente solo se hacen películas de superhéroes o basadas en hechos reales, tuvieron que recurrir al crowdfunding para financiarse; lo que supuso que en algún momento peligrase la existencia de la propia película.

Por fortuna Anomalisa al final vio la luz y con un excelente resultado. Técnicamente, como ya he dicho, es estupenda, no solo porque te olvidas de estar viendo a marionetas en movimiento, sino por cómo están hechos los planos, la iluminación, los gestos de los personajes… Sin duda mérito de Duke Johnson.

Pero también tengo que decir que es la película que más me ha gustado de Charlie Kaufman como director. Algo que sí es una novedad, ya que es mucho mejor guionista que director. Imagino que el tener el control total de su obra es lo que le lleva a querer dirigir también, pero sus mejores trabajos han sido cuando sus guiones estaban dirigidos por otros, las cosas como son.

Anomalisa es una anomalía también en esta teoría. Es una pequeña joya que funciona a la perfección. Se trata de una película de una duración normal de hora y media que sin embargo se hace cortísima. O por lo menos a mí me lo pareció. Un ritmo perfecto que solo consiguen genios como Kaufman.

La Academia de Hollywood la ha nominado en la categoría de mejor película de animación. Su rival más directa -y que tiene todas las papeletas de llevarse el Oscar- es la película de Pixar Del Revés (Inside Out). Ya sé que lo que voy ha decir está un poco cogido por pinzas, pero en cierta forma veo algunas similitudes entre estas dos películas y el mensaje que transmiten. Anomalisa bien podría ser la continuación adulta de Del Revés. ¿O no?

 

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